Jeremy Kasten, director de un par de títulos de horror, entre ellos la sangrienta The Thirst (2006), trae en este caso la obra del gran Herschell Gordon Lewis en una nueva remake de estilo propio, moderna y estilizada, en un intento de crear una obra de culto a partir de un producto de bajo presupuesto, aunque por supuesto no se trate de algo tan fácil de lograr, o al menos como intentan hacerlo. Una versión muy particular, con sus aciertos, los cuales podrían comenzar a enumerarse principalmente por su estilo visual, realmente un trabajo muy acertado de fotografía, en una combinación de tonos, logrando un extraño mix entre la época de films de los 50’s o 60’s y la actualidad. Dentro del reparto se encuentra otra de las claves del film, empezando por la pequeña aparición de Jeffrey “re-animator” Combs, Brad Dourif, la actriz Bijou Phillips y por supuesto Crispin “McFly” Glover haciendo del carismático mago ilusionista Montag, además de algunas de las denominadas Suicide Girls, quienes aportan sus bellos cuerpos para la ocasión. Por el otro lado y más allá de todo esto que se puede nombrar, el film en si es bastante extraño primeramente y confuso luego, con un guión difícil de sostener, lo que lleva a un ritmo por momentos interesantes, para luego caer en pozos que rozan lo tedioso, algo que difícilmente se pueda levantar, por mas aciertos que pueda tener. Además de esto, la confusión y el desorden logran que la historia no pueda desarrollarse de la mejor manera, o al menos ayudarnos a mantener un hilo de coherencia medianamente estable como para de algún modo conseguir la atención del espectador. La historia cuenta sobre un ilusionista llamado Montag, quien monta un show seleccionando personalmente a los participantes del público, los cuales son sometidos a actos de sangrientas torturas, que logran provocar en el espectador el efecto inmediato, aunque sobre el final todo se ve como un simple engaño. A todo esto un periodista comienza a obsesionarse cada vez más con los shows que presenta el ilusionista, hasta el punto de experimentar alteraciones y trastornos cada vez mas profundas, mientras investigan los extraños casos de muertes de jóvenes muchachas, aparentemente con las mismas heridas que el mago Montag suele producirles a la gente de su publico. Una revisión un tanto desacertada, o al menos de potencial pero no lograda por completo, de un súper clásico del gore de todos lo tiempos y de un director tan recomendable como lo es Herschell Gordon Lewis, conocido también como “the Godfather of Gore”.
DIRECTOR: Jeremy Kasten
GUION: Zach Chassler
AÑO: 2007
NACIONALIDAD: USA
1 comentarios:
Ya tengo ganas de verla.
Un saludete
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